14.1.09

Instalaciones

Por amor al arte

Moda, arte y arquitectura se fusionan en las vidrieras porteñas, que deslumbran a la clientela con propuestas que reúnen en pocos metros cuadrados a los más destacados artistas de la escena local.

Vidrieras-instalaciones, locales-galerías de arte, nuevos espacios para conjugar expresiones para acercar la indumentaria y accesorios a otras maneras de ver y hacer diseño.

Así, de la mano de la indumentaria nace un nuevo espectador, no necesariamente categorizado según su ojo crítico, común, snob o absolutista. Más bien, se caracteriza por su estado, se encuentra en un momento de construcción de imagen e identidad personal, de búsqueda de la belleza propia o ajena. Y está en un contexto propicio para la compra, que le propone variables, sugiere estereotipos, impone estilos. Dispuesto a probar y probarse, intervenir, interactuar, permitiendo el juego entre su cuerpo y un nuevo objeto. De paso o de paseo, en plena composición se encuentra con una obra de arte, una instalación que lo toma de sorpresa, o no.



Es que la moda y las instalaciones de arte comparten varias características. Ambas dependen del espacio, el contexto y la manera en que los objetos o personas interactúan con ellas. Es imposible repetirlas en su totalidad, se pueden recrear, pero nunca será la misma. Son efímeras y tienen fecha de vencimiento. Se exhiben por un tiempo determinado y luego se desmontan, quedando sólo documentos para confirmar su existencia.

De como instalar una historia

Se trata de armar una historia, de ingresar a un mundo, no solo a un local, y se logra una unidad que conjugue al todo. "Cuando vienen los visitantes-espectadores-clientes sienten alegría, es como si entraran a un cuento", dice Florencia Pérez Portillo, que es ilustradora y dueña, junto con su hermana Lucila, de Doble Sentido (Marcelo T. de Alvear 1649), un espacio claramente diferente, donde reina la moda y también el arte de mostrarla.

Ahí cada objeto, cada prenda va encontrando su lugar. El entorno es una instalación que se va modificando cada dos meses. Techos dibujados en blanco y negro, personajes y despertadores que flotan en la vidriera, remeras que penden sobre perchas transparentes, relojes del planeta portillo en las paredes, zapatitos de colores por doquier. Una cadena de inspiraciones volcadas en objetos intuitivamente ubicados en un espacio geométrico, pero a la vez cálido. Las ideas surgen según el momento y el espacio. Se divierten con el arte, jugando con total libertad generando una alternativa al consumo masivo. "Para nosotras es importante mostrar lo estéticamente encantador. Armar algo que pueda contar otra historia. Algo especial que te lleve a algún lugar, a la imaginación que no hay que perder".

L´ago (Defensa 919 y 970) es otra opción. A cada objeto se le asigna un lugar por un propósito determinado. Muebles restaurados, carteras, medias leggins estampadas, remeras, lámparas, aros antiguos y otros elementos se combinan, directa o forzadamente, para conformar pequeñas instalaciones.

Estas, fusionadas entre sí, devienen en una gran instalación. La propuesta de sus dueños, Fermín González y Luís Ricci es innovar, disfrutando del cambio constante, adentro y afuera. "Jugamos con el borde sin pasarlo, al límite subjetivo, la delgada línea entre el kitsch y el mal gusto", cuenta Claudio Giantenaso. La percepción general de los consumidores suele ser de amor odio, aunque? "al final les fascina". Sin problema puede haber un sector romántico, uno retro minimalista, uno lúdico y casi infantil, y claro, uno kitsch. Les gusta ponerle luz a todo; durante dos meses su vidriera-instalación estaba conformada por una suerte de estrella de piernas con medias largas de todos los colores, texturas y estampados posibles, iluminadas por dentro. Las medias, o lámparas, fueron el punto de partida para introducir la indumentaria a sus dos locales de San Telmo.

El ciclo Tramando Espacio Vidrieras (Rodríguez Peña 1973) ya es un clásico. El ciclo 2008 fue inaugurado por el artista plástico Clorindo Testa con Papeles.generosamente.vestidos . El proyecto combina a Martín Churba, su creador, y artistas de diferentes disciplinas, en la intervención de la vidriera, un espacio clave ya que funciona como ventana de Tramando al mundo. Trimestralmente inaugura una nueva propuesta relacionada con la colección vigente. A la obra de Testa la prosiguió Orquídeas de Cristian Francisco Antici.

El último ciclo fue 09 Mensajes para el 09 , para el cual Churba convocó a Maitena, Nine, Caloi, Rep, Liniers, Nik, Lockett, Tute y Kioskerman. "Artistas gráficos que crean maneras diferentes de contar la realidad cotidiana? los verdaderos pensadores del aquí y ahora, del diario", explicó. Frases como "ser bueno, generoso y valiente" recubren las paredes. Un piloto de lluvia crucificado, un perro en su cucha, muñecas de patas largas y pelucas que parecen estar marchando, ovillos encapsulados en tubos de redes que cuelgan del techo, ilustraciones de personajes, un maniquí y hasta una persona construida con pilas de diarios y recortes de palabras con una luz de neón celeste con la palabra amor componen este collage de mensajes. Multiplicidad de colores, técnicas y materiales combinados se instalaron para recibir este año en este rincón de Recoleta, y puede verse hasta el sábado17.

Artistas que rompen con el formato tradicional de exhibición, intervienen hoy los locales, ahora espacios que conjugan diseño, arte y moda.


publicado en La Nación / Arquitectura / 14-01-09

Carolina Pierro

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